Leo es el nombre del nuevo smartphone de Commodore
Commodore fue un nombre de garantías. ¿Quién no conoce esta famosa marca? Probablemente alguien que haya nacido en la década de los 2000 y no tuviera la oportunidad de crecer con la legendaria Commodore 64 (sólo para nombrar uno). Hoy, después de un año desde su primer smartphone (Commodore PET), la marca va a tratar de atraer atención de nuevo con el Commodore Leo, un dispositivo Android.
Este smartphone estará equipado con una pantalla de 5 pulgadas, CPU de cuatro núcleos MediaTek MT6735 a 1,3 GHz, 2 GB de RAM, 16 GB de memoria interna ampliable con una tarjeta externa, cámara trasera de 16 megapíxeles y cámara frontal de 8 megapíxeles con resolución FULL HD, todo ello gestionado por el sistema operativo Android 5.1 Lollipop y alimentado por una batería de 2100 mAh. Al parecer, el smartphone parece tener desde el principio 2 emuladores de juegos pre-instalados en el interior y que permiten iniciar los famosos juegos de la vieja escuela de la marca ya conocida.
Si bien la falta de más juegos y la no exclusividad de estos emuladores, comunes en otros teléfonos, también nos hacen pensar que este Commodore Leo no tiene nada que ver con los ordenadores y consolas que se hicieron con el mercado durante los años 70-80, aparte del logotipo que aparece con el dispositivo. Sin datos aún, y a falta de saber cuándo estará disponible y a qué precio, sólo nos queda esperar por más noticias.
Commodore fue fundada en 1962 como una fabricante de máquinas de oficina por Jack Tramiel, el Judio polaco que, después de escapar de un campo de concentración de Auschwitz en 1947, emigró a los EE.UU., donde se unió al ejército y donde se dedicó a reparar máquinas de escribir, donde más tarde se ganó la vida como taxista y, finalmente, en 1953 creó la empresa Commodore Portable Typewriter Company, una empresa con sede en Nueva York, que vendía máquinas de escribir y las reparaba.
En la década de los 50, debido a la llegada de la nueva tecnología de Japón, Jack se vio obligado a mover su negocio a otra parte. La historia de Commodore es muy larga y complicada, así como la de Nintendo y otras compañías inicialmente fundadas con un propósito diferente al actual, e incluso al alcanzado en los próximos años.