La primera pulsera de Samsung: Gear Fit

Samsung no solo ha lanzado dos nuevos smartwatches, el Gear 2 y el Gear 2 Neo, sino que también presentó una pulsera cuantificadora junto con el Galaxy S5.

Se trata de una pulsera que monitoriza y cuantifica la actividad deportiva, y a la vez, sirve de complemento para múltiples dispositivos de la familia Galaxy.

Tiene un estilo parecido al Talkband B1 de Huawei, con una pantalla curva que se adapta cómodamente a nuestro brazo. La pantalla táctil es Super AMOLED, de 1,84 pulgadas, y con una resolución de 432 x 128 píxeles. Dispone de Bluetooth 4.0 LE y lleva una batería de 210 mAh, suficiente para 2 o 3 días de uso normal y hasta 4 días de uso moderado.

Además, igual que el resto de dispositivos que presentó la compañía, el Gear Fit es resistente al polvo y al agua, con una certificación de IP67. El Gear Fit tiene unas dimensiones de 23.4 x 57.4 x 11.95 mm y pesa tan solo 27 g.

Incluye también una colección de sensores para ayudarnos a sacar el máximo partido a nuestras sesiones de entrenamiento. Entre ellos podemos encontrar un medidor de frecuencia cardíaca, un podómetro, un contador de calorías, un cronómetro y un monitor de sueño. La aplicación S Health nos permitirá hacer un seguimiento de toda nuestra actividad deportiva.

El Gear Fit no solo sirve de complemento para seguir nuestro ejercicio, sino que mediante Bluetooth, también nos permite ver las notificaciones que recibimos en nuestro smartphone. El control es muy sencillo, y podemos cambiar de pantalla fácilmente deslizando el dedo por su superficie.

El ofrece un nivel adicional de personalización gracias a las correas extraíbles. Se pude cambiar fácilmente de correa, y por el momento, la correa del Gear Fit estará disponible en tres colores, gris, negro y marrón. Lo encontraremos en el mercado a partir del 11 de abril, aunque Samsung aún no ha anunciado el precio.

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